Entre los diversos tipos de accidentes que pueden ocurrir en las carreteras, la colisión por alcance es uno de los más comunes y a menudo mal entendidos. Especialmente la cuestión de quién tiene la culpa en un siniestro así resulta muchas veces confusa. Por eso, vamos a analizar qué entendemos por alcance, sobre todo en los accidentes múltiples o en cadena, qué los suelen provocar y qué debes examinar si se produce uno.
¿Qué es una colisión por alcance?
Una colisión por alcance, también conocida como «choque trasero», es un tipo de accidente de tráfico en el que un vehículo choca contra la parte trasera de otro. Este tipo de accidente es especialmente común en situaciones de tráfico denso o cuando los conductores no mantienen una distancia de seguridad adecuada. En algunos casos, las colisiones por alcance pueden dar pie a accidentes en cadena, si involucran a varios vehículos.
Accidentes en cadena y distancia de seguridad
Los accidentes en cadena son un escenario aún más complicado, debido a que implican a múltiples vehículos que se chocan en secuencia. La distancia de seguridad entre vehículos es esencial para prevenir estos accidentes, porque mantener una distancia adecuada permite que los conductores tengan suficiente tiempo para reaccionar si se produce una detención repentina del vehículo de delante.
Tipos de colisiones múltiples
Dentro de las colisiones por alcance, existen ciertos tipos de colisiones múltiples, como:
- Alcance por lanzamiento, que ocurre cuando un vehículo sufre un impacto desde atrás y se lanza hacia adelante, provocando otra colisión con el vehículo de delante.
- Doble alcance trasero implica que un vehículo es golpeado en la parte trasera al frenar de repente, debido a que el vehículo de detrás no ha tenido tiempo de frenar también.
Factores que aumentan el riesgo de accidente múltiple
Los factores que juegan un papel importante en un accidente múltiple son varios, pero todos dependen en mayor o menor medida de nuestra actitud y comportamiento al volante. Los más relevantes son estos:
- Las inclemencias meteorológicas:
Las condiciones climáticas adversas dificultan la visibilidad y el control adecuado de nuestro vehículo. Siempre que se den estas condiciones deberíamos extremar la precaución.
- Conducir distraído
Las distracciones suelen provenir del uso del teléfono móvil o el GPS mientras conducimos, así como comer al volante o cualquier otra actividad que reste atención de la carretera.
- Conducir a alta velocidad
Conducir a demasiada velocidad reduce el tiempo de reacción, y además agrava el impacto en caso de producirse, por la mayor inercia.
- No respetar las leyes de tráfico
Hacer caso omiso de las señales y, en general, las normas de tráfico, te expone a riesgos innecesarios. Dichas normas existen precisamente para garantizar una conducción segura y minimizar los accidentes.
- Conducir bajo los efectos del alcohol u otras drogas
Cualquier sustancia que altere tus sentidos al volante se traduce en mayor riesgo de colisión, al modificar la percepción del entorno y reducir la capacidad de reacción.
Lo que se debe investigar en un accidente múltiple o en cadena
Para determinar la responsabilidad de un accidente múltiple (y buscar después una indemnización justa por ello), es conveniente llevar a cabo una investigación lo más exhaustiva posible. A continuación, te señalamos las principales áreas que deberías investigar después de un accidente en cadena.
- Averiguar quién golpeó primero
La secuencia de los impactos es clave para determinar la culpabilidad en un accidente múltiple. Para ello, trata de recopilar testimonios de testigos y pasajeros, así como observar cualquier evidencia física en la escena que pueda ayudarte a establecer quién inició la colisión.
- Versiones de testigos, pasajeros y otros conductores
Reúne testimonios de todas las personas presentes en el lugar del accidente, tanto testigos como pasajeros de los vehículos involucrados. Sus versiones pueden arrojar luz sobre cómo ocurrió el accidente y quién podría ser considerado culpable.
- Atestado policial del accidente
El atestado policial es un documento crucial que proporciona detalles objetivos sobre el accidente, además de tener carácter oficial. Contiene información sobre la ubicación, la hora, las condiciones climáticas, las declaraciones de los conductores y a menudo también una evaluación inicial de la culpabilidad. Por eso es bueno asegurarse de obtener una copia del informe, y de otros documentos importantes para la indemnización por accidente.
- Daño del vehículo
Examina y documenta los daños en todos los vehículos implicados. Hacer fotografías de los daños desde diferentes ángulos puede ser especialmente útil, porque estos registros pueden ayudar a determinar la fuerza y la dirección de los impactos, lo que a su vez puede ayudar en la investigación.
- Rastro dejado en la escena del accidente, marcas de frenado y restos de vehículos
Si puedes, no dudes en examinar la escena del accidente en busca de rastros físicos, como pueden ser las marcas de frenado en el pavimento, o restos de vehículos que hayan quedado en el lugar. Estos restos pueden dar pistas sobre la velocidad, la dirección y la secuencia de los impactos, algo que es esencial para establecer quién ha sido el responsable.
Puedes saber más en nuestro artículo sobre qué hacer tras un accidente de tráfico.
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